domingo, 9 de febrero de 2014

Capítulo 25 (Capítulo Final)

Capítulo 25 (Capítulo Final)
Sin Planes Para Amar

Desde esa misma noche Marcos se quedó a vivir con Victoria en el Departamento de ella.  Marcos ya no podía pasar, más bien ya no quería pasar una noche sin Victoria quería compartir y disfrutar con ella de todas y cada una de las noches, como también de los amaneceres.  Marcos había alquilado espacio en un almacén para guardar la mayoría de sus muebles para vender mucho más rápido su apartamento. 

Marcos preparaba una sorpresa para Victoria.  Pudo venderle su apartamento a uno de sus compañeros de trabajo una vez ellos blanquearon su relación frente a sus compañeros. 

***Inicio del Flashback***
Cuando ambos llegaron al otro día a la empresa lo primero que decidieron hacer fue informar en Recursos Humanos de su relación de pareja.  Como ambos habían entrado a la empresa tomados de la mano, los rumores no se hicieron esperar.  A la hora del almuerzo, tanto Marcos como Victoria estaban sentados en la misma mesa, cuando las “amigas” de Victoria se acercaron a ellos buscando más información con relación al chisme que rondaba sobre ellos por los pasillos de la empresa.

Rebecca y Ellen se acercan a la mesa de Marcos y Victoria y directamente y sin anestesia les pregunta.
R: Hola chicos, es cierto lo que comentan por ahí.
M: Y que es lo que chismotean.
E: Que ambos llegaron juntos bien agarraditos de las manos.

Victoria le abrió los ojos a Marcos.  Él le insinuó a ella que había llegado el momento de blanquear su situación.  Victoria le dio el visto bueno.

V: Dile, Marcos
M: No solo llegamos juntos tomados de las manos como una pareja, sino que somos una pareja que se aman y estamos felizmente comprometidos y nos vamos a casar muy pronto.  (Marcos acerca a Victoria y la besa).

Ante la mirada atónita de Rebecca y Ellen, los demás compañeros que se encontraban en el comedor, los aplaudieron ante la tierna expresión de amor de Victoria y Marcos.

XXX: Ahora sí que Guerrero, fue capturado (gritó uno de sus amigos).
M: Capturado no, enamorado si, completamente enamorado de la mujer de mi vida.  Además les quiero informar que mi apartamento está a la venta porque de ahora en adelante mi futuro será al lado de Victoria.
***Fin del Flashback***

También, a través de uno de sus amigos que era Corredor de Bienes Raíces, Marcos había separado una casa con opción a compra, pues antes de comprarla quería que también Victoria la viera y le diera el oka. 

La casa se encontraba cerca de la ciudad, aunque se podía respirar el aire puro y fresco de las montañas, tal y como Victoria le había expresado.  La misma se encontraba ubicada en un gran terreno plano arriba de la montaña, tenía una vista panorámica donde se podía apreciar la ciudad.  La casa en sus interior tenía 5 recámaras con sus respectivos baños, sala, comedor, una amplia cocina, salón de entretenimiento como también tenía una habitación que bien podía convertirse en la oficina de ambos.  En la parte exterior, la casa tenía una gran terraza que daban al jardín.  Su amplio jardín tenía como punto focal una piscina infinita y desde allí el horizonte se mezclaba con el borde infinito de la misma.  El jardín estaba rodeado de mucha naturaleza tanto de árboles frutales, como de flores y palmas que daba la sensación de que estaban en el paraíso.

En la empresa, Marcos se dirige a la oficina de Victoria.
Marcos toca la puerta.

V: Adelante.  (Marcos cierra la puerta y se acerca a Victoria, la besa y la agarra por la cintura pegándola a su cuerpo).
M: Como se encuentra la futura señora Guerrero.
V: Bien, mi amor que sorpresa (rodeándole los brazos por el cuello de Marcos, devolviéndole el beso).
M: Me encanta que trabajamos en la misma empresa, porque siempre que te extrañe con solo bajar un piso te tengo entre mis brazos y te puedo hacer muchos mimos, abrazarte y darte besitos por todos lados.
V: Si, a mí me fascina, pero igual debemos comportarnos, cualquier persona puede entrar y vernos.
M: Oka, Oka, pero igual me vuelve loquito estar así, abrazaditos.
V: Mi amor, y se puede saber a qué se debe tu visita.
M: Además de extrañarte, te vine a buscar para llevarte a un lugar.
V: Y, se puede saber a dónde?
M: No importa donde, vamos en mi moto.
V: En tu moto?  Marcos sabes que me asustan las motos.  Además estoy embarazada y no quiero exponerme a cualquier accidente por tonto que sea.
M: Tienes toda la razón, como tú digas, mi amor, vamos en el auto.

Cuando llegaron, Marcos, como todo un caballero, le abre la puerta del auto a Victoria.

V: Mi amor y a quien vamos a visitar (Victoria no se había percatado que Marcos tenía las llaves de la nueva residencia).
M: Victoria, te acuerdas que hace unos días te mencioné que tenía una sorpresa para ti (Victoria se acuerda y abre sus ojos ante la sorpresa).
V: Si
M: Pues hace varios días vendí mi apartamento y Matías Bermúdez, el Corredor de Bienes Raíces, me ayudó a obtener esta casa.  Pero como te conozco, sé que te hubieras enojado si no eras parte en la decisión en la compra, pues le dije a Matías que prefería que tú la viera primero y si te encantaba, finalmente la íbamos a comprarla. 
V: Gracias, por tenerme en cuenta en la decisión de comprar nuestra casa, te amo.
M: Yo también te amor (besándola).  Bueno entramos a la casa, estoy seguro que te enamorarás de cómo está distribuida, de la amplitud de todos sus cuartos, sala y cocina.  Sobre todo su jardín.

Ambos entraron en la casa y Victoria no salía de sus asombro de que todo lo que ella había expresado que tuviera su casa estaba presente en ésta.

V: Esta bellísima, me encanta a pesar de que es grande, tiene una calidez de hogar.
M: Mi amor aunque yo sé que tú no querías una casa de 5 cuartos, es mejor así porque yo quiero que nuestro hijo tenga hermanitos, además para cuando nuestras familias nos visiten hay espacio suficiente para acomodarlos.
V: Tienes razón, tenemos que preparar una habitación para Lautaro.  Te acuerda que te mencioné que hable con tu hermana hace varios días pues ella me preguntó si nosotros nos podíamos hacer cargo de Lautaro cuando ella se vaya de luna de miel, me dijo que solo confía en nosotros dos para cuidarlo. 
M: Y le dijiste que si
V: Si, por supuesto, además extrañamos a Lautaro, o no.
M: Si, además le voy a tener que agradecer toda la vida.  Gracias a él, hoy puedo decirte cuanto te amo y estoy completamente feliz de formar una familia junto a ti y a nuestro hijo (tocándole la barriga a Victoria).

Marcos le fue enseñando cada espacio de la casa por dentro y por fuera.

V: Mi amor definitivamente esta es nuestra casa.  Es ideal para nosotros ahora y siempre.

Había pasado un mes, en donde Marcos y Victoria tenían el tiempo contado entre la mudanza a su nueva casa y los preparativos de su boda.  Habían contratado una decoradora de interiores y una organizadora de actividades que le ayudaran en ambos proyectos.

La boda se acercaba tan solo faltaba una semana, finalmente hoy, Marcos y Victoria firmarán el contrato de servicios publicitarios con Barrios Software.  Para sus adentros, Marcos no veía la hora de verle la cara a Francisco cuando este se entere de que Victoria estaba comprometida.

Marcos y Victoria lo habían citado en la oficina, para la firma de su contrato.  Marcos lo recibe y lo lleva al Salón de Conferencias donde se encontraba Victoria preparando los por menores de la reunión.

M: Buenos Días, Francisco
F: Buenos Días, y la Srta. Fernández.
M: Muy bien, ya nos está esperando.
F: Pregunto porque nunca está de más contar con una belleza así, me entiendes, no Marquitos.
M: Victoria, además de ser una hermosa mujer, es una de nuestras mejores empleadas es de las empleadas que no deja nada a la improvisación. 

Ambos llegan al Salón de Conferencias.
V: Buenos Días, Señor Barrios, hoy es el gran día.
F: Si esperemos que no hayan mayores inconvenientes.
M: De eso no quepa la menor duda. 
V: Nos sentamos.

Inmediatamente Marcos toma la iniciativa y le ofrece la silla al lado izquierdo de él a Victoria y la silla del lado derecho a Barrios.  Quería evitar que hubieran malos entendidos por lo que se adelantó y le tomó deliberadamente la mano derecha a Victoria y de ese modo Barrios viera el anillo de compromiso.

F: Como que alguien se me adelantó.
M: De ningún modo, ese alguien siempre estuvo presente, no es verdad, mi amor (Dirigiéndose a Victoria, besando su mano)
V: Si, mi amor (sonriéndole a Marcos)

La cara de Francisco Barrios se transformó adquiriendo todas las tonalidades rojizas, que no tuvo más remedio que dedicarse a terminar lo antes posible con la firma del contrato.

Una vez terminaron de firmar el contrato y dejando todo al día en sus respectivas responsabilidades laborales tomarían unas merecidas vacaciones para la celebración de su boda y posteriormente su luna de miel.

Ya se habían mudado a su nueva casa ya decorada, desde las habitaciones hasta la terraza exterior.  El estilo moderno y elegante estaba presente en sala, comedor, cocina donde los colores metálicos, negros y blancos predominaban.  La oficina de ambos tenía la tecnología necesaria para trabajar cuando así fuera necesario.  Los cuartos decorados parecían salidos de las revistas de decoraciones de interiores.  El de ellos tenía un juego de cuarto con cama matrimonial tamaño King en madera oscura que hacía contraste con la claridad de los colores verde lima y blanco de las paredes.  De los cuatros restantes cuartos, el más cercano a su recamara matrimonial fue destinado para su primogénito(a), por supuesto aún desconocían el sexo, por lo que lo pintaron con color blanco y más adelante cuando supieran si era niño o niña le darían colores correspondiente.  Otro de los cuartos lo usaría Lautaro cuando los visitara, hay ya ubicaron la cuna que previamente Marcos había comprado.  Ya los otros dos cuartos los destinaron, por el momento, para cuando los visitara su familia, aunque nos descartaban que uno de ellos fuera para su segundo hijo(a).

Había llegado el día más esperado, el casamiento de Marcos y Victoria.  Ellos habían querido celebrar su unión matrimonial junto a su familia y sus amistades más cercanas. 
Ambos se habían quedado a dormir en el apartamento de Victoria dos noches antes a boda por pedido del organizador que quería darles una sorpresa, ya que la recepción sería en el jardín de la nueva casa.

Habían elegido casarse por en el Registro Civil en horas de la mañana y en la tarde en la Iglesia.  El momento más emotivo de la ceremonia fue cuando Marcos y Victoria pronunciaron sus votos.

***Inicio del Flashback***
Padre en la liturgia:
El Sacramento del Matrimonio celebra el amor, es decir, el encuentro con el otro, la entrega mutua, la confianza, la comunicación, la aceptación, en una palabra, cuando el amor por el otro es la razón y el común denominador de la vida.  La comunidad en el Matrimonio, celebra que todo amor viene de Dios.  Los Cónyuges son el símbolo del amor de Cristo.  Hermanos, seamos testigos de la historia de amor que hoy le ofrecen Marcos y Victoria a Dios, para bendecirla con la Alianza Santa del Matrimonio.

Padre: Ha llegado el momento en que los novios se dicen sus votos matrimoniales.  Marcos es tu turno.

Ambos se giran mirándose de frente y agarrados de las manos.
M: Victoria, no estaba en mis planes enamorarme, casarme, formar una familia, pero el destino me tenía preparada una sorpresa, y que sorpresa.  Me enamoré desde el primer día que te vi, aunque tarde un poco, (se rie).  No me arrepiento, te quiero a ti y te tomo como mi mujer y madre de mis hijos, porque quiero varios, y me comprometo a hacer crecer nuestro amor día a día, (hizo una pausa porque ya sus lágrimas le impedían continuar con fluidez).  A esforzarme siempre, pase lo que pase, y a trabajar juntos por el futuro que esperamos, para que nuestras vidas lleguen a ser estímulo de alegría y de esperanza para nuestros hijos y nuestro matrimonio sea señal de la presencia de Dios entre los hombres, por eso yo, Marcos, te acepto a ti Victoria, como mi esposa y prometo serte fiel en lo próspero y en lo adverso, en la salud y en la enfermedad, y amarte y respetarte todos los días de mi vida.

Padre: Tu turno Victoria.

Victoria no había comenzado a pronunciar sus votos y ya las lágrimas amenazaban con arruinar su maquillaje,  Marcos extendió una mano y le secó suavemente algunas de sus lágrimas). 

V: Marcos, yo tampoco tenía planes de enamorarme y las ganas de formar una familia, tenía otras prioridades.  Pero no conté conque tú fuiste derribando poco a poco cada uno de mis opiniones que tenía sobre ti, fuiste entrando en mi corazón para más nunca podrá salir, porque vi en ti al verdadero hombre que eres.  Te quiero a ti y te tomo como a mi esposo, y me comprometo a hacer crecer nuestro amor día a día, a esforzarme siempre, pase lo que pase, y a trabajar juntos por el futuro que esperamos, para que nuestras vidas lleguen a ser estímulo de alegría y de esperanza para todos y nuestro matrimonio sea señal de la presencia de Dios entre los hombres, por eso yo, Victoria te acepto a ti Marcos como a mi esposo y prometo serte fiel en lo próspero y en lo adverso, en la salud y en la enfermedad, y amarte y respetarte todos los días de mi vida.
***Fin del Flashback***

La recepción la quisieron hacer los jardines de su nueva casa.  El organizador de la boda decoró el jardín con tonalidades violetas y azul turquesa que combinaba con el azul de la piscina y las orquídeas que rodeaban parte del jardín.  Habían instalado un puente sobre la piscina que fue de inspiración de los fotógrafos.  Cuando cayó el atardecer, la vista desde el jardín le impregnó un romanticismo que a decir verdad la diosa naturaleza se confabuló con los ahora esposos para la excepcional vista panorámica.

Cuando Marcos y Victoria hicieron su entrada al lugar de la recepción no salían de su asombro de la transformación y el ambiente tan romántico que se percibía en su jardín.  Tanto Marcos como Victoria estuvieron celebrando hasta el amanecer, donde nuevamente todos disfrutaron de las maravillas de la naturaleza amanecer.  Al otro día Marcos y Victoria comenzaban su viaje de luna de miel a Nueva York, pero no sin antes querían festejar su noche de bodas.  Marcos y Victoria se despidieron de todos y se fueron juntos a un Hotel antes de partir a su viaje de boda.


Ambos ya llegando a su habitación de Hotel
M: Mi amor, al fin solos.  (Marcos le dice al dejarla sobre el piso una vez mientras sostenía a Victoria al entrar a la habitación).
V: Recuerda que nos acompaña (tocándose su barriga) nuestro bebé.
M: Siempre está presente en mis pensamientos y en mi corazón.  Y me podría usted Señora Guerrero contestarme ¿eres feliz?
V: Completamente, pero porque me preguntas acaso tienes dudas.
M: Nunca, de algo estoy seguro que nuestro amor es real y que va a perdurar más allá de la eternidad.  Y que nuestra felicidad será infinita.  Pero quiero que me prometas que si algún día sientes que por alguna razón no eres feliz, confíes en mí y me cuentes.  Como recién te prometí ante Dios, hacer crecer nuestro amor día a día y a trabajar juntos por el futuro que nos espera junto a nuestros hijos. 
V: Lo sé estoy segura de ello, Marcos, mi amor, te amo. 

Victoria tomó la iniciativa y comenzó a besar a Marcos.

M: Que lindo beso, mi amor. 

Marcos sonrió ante la iniciativa de su ya esposa y futura madre de sus hijos.  Por un momento dejó que Victoria lo llevara de la mano hacia la recámara.  La luz-del día entraba por la ventana, iluminando la habitación con un brillo plateado.  Sus miradas se encontraron, se conocían y se conocían muy bien.  Marcos besó lentamente, profundamente, con tanta paciencia que Victoria pensó que iba a volverse loca.  La excitación crecía en su interior, apropiándose de todo su ser.  Lo deseaba como siempre lo había deseado.  Victoria necesitaba sentir sus manos y su boca en la piel.

Como si le hubiera leído sus pensamientos, Marcos le pasó las manos por el cuello, bajando por los hombros hasta llegar a sus senos.  Victoria emitió un gemido de placer.  Marcos comenzó a desabrochar el vestido, mientras ella le desabrochaba la camisa y cuando terminó se la sacó junto a su saco.  Cuando tocó su piel con las manos, Marcos también gimió.
Avanzaron juntos hacia la cama, terminándose de desnudar mutuamente, hasta que quedaron de pie junto a ésta completamente desnudos.  El viento golpeó los cristales, pero Victoria no pareció darse cuenta.  Sólo podía pensar en Marcos y en la sensación que provocaban sus músculos bajo sus manos, sus labios en su cuello.
Marcos le acarició los senos y ella cerró los ojos, saboreando su contacto.  Se mordió el labio para no gritar, y cuando la boca de Marcos sustituyó a sus manos, dejó escapar el grito.  Arqueó la espalda, aferrándose a sus hombros.
Marcos se esforzó por mantener el control, pero sabía que se volvería loco si no la tenía pronto.  Se dijo a si mismo que esta vez fuera muy especial para Victoria.  Tenía que ir despacio, con paciencia, pero sabía que era una batalla perdida.  Se había sentido completamente excitado desde que la había besado minutos atrás y la sensación empezaba a transformarse en verdadero dolor físico.  Las uñas de Victoria se clavaron en sus hombros, excitándolo más aún.

M: Victoria, quiere que la lleve al fin del mundo
V: Marcos, por favor lléveme al fin del mundo.

Cayeron juntos sobre la cama, hundiéndose en el colchón.  Victoria estaba debajo de Marcos y rodeaba su cuello con los brazos.  Se besaron y se acariciaron con frenesí.  Marcos fue bajando la mano hasta acabar entre sus piernas.  Victoria contuvo la respiración, gimiendo.

Estaba segura de que se iba a morir de la necesidad que sentía.  Se aferró a las sábanas, y después a los hombros de Marcos, moviéndose de forma rítmica.  Había olvidado por completo la realidad.  Sólo existían los sentimientos y las sensaciones.  Y una intensa pasión que cada vez minuto a minuto.  Marcos no podía aguantar un instante más.  Se colocó sobre Victoria, separándole las piernas, y la penetró lentamente.  Sus ojos se encontraron.  La luz de la habitación iluminaba la suave piel de Victoria.  Marcos cubrió el cuerpo de Victoria con el suyo, convirtiéndola en parte de sí mismo, y convirtiéndose en parte de ella.  Victoria levantó las caderas para atraerlo más hacia su interior.

Se movieron juntos, cada vez más deprisa.  Sólo existían ellos dos.  Victoria sintió que volaba, y después caía por un precipicio, deshaciéndose en un millar de fragmentos.  Gritó, y Marcos estaba con ella.  Se aferró a él, mientras el estremecimiento final recorría sus cuerpos al unísono.

Se quedaron tumbados, esperando a que su respiración recuperase el ritmo normal.  Marcos apretó su frente húmeda contra la de Victoria y le besó la nariz, las mejillas, los labios, hasta llegar adonde crecía el hijo(a) de ambos.  No quería apartarse de ella, pero sabía que pesaba demasiado, de modo que giró, colocándola sobre él.  Victoria se apoyó en su pecho, y escucharon juntos el sonido de sus corazones.
Victoria tenía a Victoria abrazada.  Sentía los latidos de su corazón contra su pecho.  Estaba muy quieta, con sus largas piernas entrelazadas con las suyas.  Pensó que se habría quedado dormida, pero cuando le acarició el cuello se dio cuenta de que no era así.

M: Mi amor necesitamos descansar ya en la noche viajamos a Nueva York y disfruta de nuestro viaje de bodas.
V: Me haces tan feliz, son tantas las emociones que pasamos que aún no caigo en tiempo. 
M: Si disfrutamos tanto nuestra boda y que me dices de la recepción.  Qué lindo se veía nuestro jardín.
V: Tenía una atmosfera de romanticismo.  Me encanto la combinación de colores.  Pero lo más lindo fueron el atardecer y el amanecer.
M: Si, ¿Qué te parece si cuando ya lleguemos de nuestros viaje hacemos un asadito en agradecimiento a nuestros familiares y amistades?.

Marcos no recibió la respuesta de Victoria, al verificar, ella ya se había dormido sobre su pecho y él también aprovechó para descansar.

Prólogo
Ocho meses después nacía su primogénito de nombre Andrés Guerrero Fernández.  Tres años después su matrimonio volvió a ser bendecido con el nacimiento de Malena Guerrero Fernández.  Luego del nacimiento de Malena, Victoria decidió pasar más tiempo en casa con los pequeños dejando atrás su carrera profesional.  Marcos notaba a Victoria triste, no era la misma.  Como en su momento le pidió Marcos, Victoria le expreso que ya extrañaba su trabajo.  Por tal razón, Marcos decide formar su propia Agencia de Publicidad, de ese modo Victoria se sentiría útil trabajando en ella junto a su esposo.  Ambos muy bien podrían trabajar desde su casa.  Los años pasaron, Lautaro pasaba mucho tiempo con ellos en la casa junto a sus dos hijos, los tres se llevaban como hermanos.  El problema era de Malena que tenía a tres cuidas y solo su madre la defendía de tres. 

Años después, Marcos y Victoria se sentían cada día más orgullosos de sus tres hijos (porque a Lautaro lo querían como tal).  Lautaro había estudiado leyes y había decidido junto a su novia Laura formalizar su relación.  Andrés le gustaba las artes dramáticas.  Era todo un actor en ciernes.  Estaba grabando su quinta novela, esta vez como protagonista de la historia.  Aún no había sentado cabeza, aunque Marcos decía que ya le llegará la hora, que se mirara en su espejo.  La pequeña Malena estaba terminando sus estudios básicos en medicina, quería especializarse en Cardióloga Pediátrica, siempre le gustaron los niños.  Sus relaciones no duraban mucho, ya sea por sus estudios o porque su padre o hermanos se los espantaban.  Victoria se veía en ella.  Ella siempre le daba prioridad a su carrera profesional.  Solo le decía que cuando llegara el hombre de su vida lo importante es no darle la espalda y asumir que llegó el momento de amar aun cuando no estaba en sus planes.


Fin

sábado, 8 de febrero de 2014

Capítulo 24


Capítulo 24

La luz de exterior penetraba a través de las cortinas del cuarto de Victoria.  El primero en despertar fue Marcos y aprovechando que Victoria aún seguía dormida, se levantó sigilosamente y se dirigió a la cocina para prepararle un desayuno completo a su futura esposa.

Marcos regresaba al cuarto con desayuno para ambos.  Marcos había preparado tostadas con Nutella, frutas, jugos y café en una bandeja.  Al entrar a la habitación colocó la bandeja sobre la mesita de noche.  Se acercó a la cama y contempló a Victoria dormir profundamente y comprendió que la felicidad de su vida iba depender por siempre de esa mujer dormía profundamente.  Esa mujer que dentro de nueves meses lo convertiría en padre.  

Lentamente se acercó a Victoria y la besó tiernamente en sus labios.  Victoria abrió sus ojos y al percatarse que era Marcos extendió un brazo hacia la nuca de él y lo atrajo hacia ella besándolo apasionadamente.  Marcos respondió y entre besos se dieron los buenos días.

M: Buenos Días, mi amor.  Que rico beso.
V: Buenos Días, me encanta despertarme con un beso tuyo.
M: Les preparé a ambos un delicioso desayuno.
V: Um, se ve delicioso.  Estoy segura que nos encantará (Victoria se toca suavemente su barriga y sonríe a Marcos, él extiende su mano hacia la de Victoria en señal de felicidad).  Marcos?
M: Que pasa?  Porque de pronto veo tanta seriedad en tu mirada.
V: Anoche no hablamos, pero debemos de ponernos de acuerdo en varios aspectos.
M: Mi amor, se que tenemos que ponernos de acuerdo en que va pasar con nosotros, es decir con nuestra situación en la empresa, donde vamos a vivir, cuando nos vamos a casar, o que nombre ponerle a nuestro hijito o hijita.
V: Marcos, primero lo primero.  Debemos decidir qué vamos decir o como debemos comportarnos en la empresa.
M: No existe alguna norma o reglamento que prohíban las relaciones entre empleados.  Yo no quiero que nuestra relación sea una a escondida.  Además, quiero que todos y en especial todas las mujeres de la empresa se enteren que el Don Juan Tenorio tiene dueña y esa dueña eres tú. (Ambos se besan).
V: Si, ya me perteneces, como yo, más bien, nosotros te pertenecemos a ti.
M: Si.  Con relación a como nos comportaremos en la empresa, al ser pública nuestra relación, no tenemos que esconder nuestros sentimientos frente a ellos.  De ese modo las cacatúas se convencerán que lo nuestro es completamente real.  Punto uno aclarado.  Donde vamos a vivir.
V: Actualmente mi apartamento es mucho más chico que el tuyo.
M: Mi amor, no te preocupes.  Ya está decidido, como te dije anoche, voy a vender mi apartamento y compramos una casa más grande.  Quiero que nuestro hijito o hijita tenga un espacio donde pueda jugar libremente.  Colocar unos columpios con un tobogán, un asador y hasta una piscina en el jardín.  También podemos instalar una oficina para ambos, donde podríamos trabajar cuando no estemos en la empresa.  Mientras tanto, vivimos acá en los que tramitamos la compraventa de los mismos.  Que piensas del segundo punto.
V: Para serte franca siempre soñé con tener una casita que tuviera un amplio jardín en una montaña y de ese modo respirar el aire puro y fresco de la naturaleza.
M: Creo saber dónde podemos…
V: ¿Donde?
M: No sé, no sé, es una sorpresa.
V: Y no me vas adelantar algo (Victoria se acerca para hacerle mimos y así convencer a Marcos para que le adelante algo).
M: Victoria, Victoria, ah, ah por favor para, para que no respondo.
V: eso es lo que quiero que me digas cual es la sorpresa.
M: Si te digo, no va ser sorpresa.  Mejor pasamos al próximo punto, sí.
V: Esta bien si no me vas a decir, tampoco nos vamos a poner de acuerdo en cuando nos vamos a casar.
M: Victoria Fernández, me estás sobornando.  (Acercándola a él, comienza un recorrido de besos desde el cuello hasta el nacimiento de los senos de Victoria.  De ese modo Victoria se extasió y se fue en un vaivén de emociones).  Porque quiero recordarle que desde anoche usted me hizo la promesa que se iba a casar conmigo.  Oka.
V: Oka
M: Ay qué lindo mamadera.

Marcos al ver que sus caricias los iban conduciendo a un lugar donde solo ellos sabían, colocó la bandeja nuevamente sobre la mesita de noche y se recostó en la cama junto a Victoria para continuar con el avance romántico hacia ella. 

M: Victoria de algo estoy seguro, que me quiero casar por la iglesia y por lo civil.  (Ambos continuaban con sus caricias de parte y parte).

V: Yo también.  Y cuando vamos a sacar cita en el Registro Civil.
M: Que te parece dentro de par de horas.  Porque esto que comenzamos no lo podemos dejar incompleto.  ¿Qué te parece?
V: De eso no quepa la menor duda.

Ya ambos comenzaron a besarse con toda la fuerza del amor y de las emociones que los embarga.  En aquel momento nada importaba excepto la fiera pasión que ardía entre ellos.  Victoria le devolvió beso por beso, caricia por caricia.  Sus manos sintieron la calidez de la piel desnuda de él al rozarle su ancha y tonificada espalda.

La boca de Marcos era cálida contra la nuca de Victoria, sus dientes le mordisquearon el lóbulo de la oreja y besaron después el cuello, quitándole lentamente la bata y así dejarla solo en braguitas.  Marcos volvió a inclinarse sobre ella besándole la boca.

Victoria gimió de placer al sentir la mano de Marcos abrazar su pecho.  Tenía el pezón hinchado y tenso, Marcos no dejaba de saborear su boca.  Victoria deseaba a aquel hombre, lo deseaba con ardor, con pasión pero sobre todo con un verdadero amor. Todo en él le gustaba, le encantaba.

Victoria se arqueó instintivamente la espalda cuando él besó primero un pecho y luego el otro.  Su lengua lamió los pezones suavemente, produciendo en ella un placer incontrolable que la poseyó por entero mientras él bajaba una mano por el estómago hasta el borde de las braguitas.  Marcos deslizó a través de las piernas de Victoria la última barrera que intervenía el disfrute total entre ambos.

Victoria enredó convulsivamente los dedos en los cabellos negros de Marcos reteniéndolo a su lado, deseando que no parara, deseando que aquel placer no acabara nunca.  Y comenzó a sentir un calor ardiente en lo más profundo de su ser, un fuego que invadía todo su cuerpo ante sensaciones desconocidas para ella hasta ese momento, un fuego que la hacía caer, caer, caer... por un precipicio sin retorno.

M: Tranquila, Mi amor (dijo de pronto Marcos estrechándola con fuerza contra su cuerpo tenso).   A nuestro hijo o hija no le pasará nada, al contrario siempre se sentirá orgulloso(a) del amor de sus padres (Marcos le dice a Victoria al sentir los espasmos que convulsionaban todo el cuerpo de ella).
V: Mi amor no te detengas, por favor, estoy bien, estamos bien.

Ambos continuaron hasta llegar al fin del mundo.  

Una vez culminaron el acto de amor, ambos balancearon sus respiraciones y decidieron que tomar una corta siesta es lo mejor para recobrar las energías utilizadas.  Pero antes Victoria le dijo a Marcos.

V: Marcos con respecto al ultimo punto, todavía faltan varios meses para ponernos de acuerdo.  (A la vez que se recuesta sobre el pecho de Marcos cerrando sus ojos).

M: Oka (cerrando también sus ojos).



Continuará ….